¿Qué es la Pluma Ibérica y cómo prepararla?
Si alguna vez has visto pluma ibérica, sabrás que es un corte pequeño y triangular. Lo localizamos en la parte de delante del lomo del cerdo ibérico, cerca del cuello. Es por su forma, precisamente, por lo que recibe el nombre de pluma ibérica.
Ahora bien, ¿qué hace a la pluma ibérica tan especial? Pues, posiblemente, su perfecto equilibrio entre magro y grasa, que la convierte en una carne de lo más jugosa y con un sabor irresistible.
No podemos continuar sin repasar un poco sobre el cerdo ibérico. Como ya hemos dicho en reiteradas ocasiones, el cerdo ibérico es una raza propia de la Península Ibérica. Estos cerdos los criamos en libertad en dehesas, en nuestro caso en Huelva y Extremadura, alimentándolos de bellotas durante la montanera. Gracias a esta vida al aire libre y a su alimentación, la grasa se infiltra y dota a las carnes ibéricas de su tan característico sabor.
Características de la pluma ibérica
Son varios los elementos que caracterizan a la pluma ibérica. No obstante, entre las características de la pluma ibérica destacan tres:
- Su sabor, intenso, gracias a la infiltración de grasa intramuscular.
- Su textura, tierna, debido también a dicha infiltración de grasa, conocida como marmoleo. Es una carne que no se seca con facilidad, sino que mantiene su jugosidad una vez cocinada.
- Su valor nutricional, ya que la pluma ibérica es fuente de proteínas, vitaminas y minerales. La grasa que contiene es, en su mayoría, monoinsaturada, es decir, similar al aceite de oliva y más saludable que otras.
Cómo preparar la pluma ibérica
Si quieres saber cómo preparar la pluma ibérica, debes considerar tres puntos:
- Temperatura ambiente. Sácala del frigorífico, al menos, 30 minutos antes de cocinarla.
- Sazonado. No te explayes, la pluma ibérica es una carne tan sabrosa que con un poco de sal y pimienta es suficiente. No queremos esconder su sabor natural.
- Cocción. La parrilla o la plancha son las mejores formas de cocinar la pluma ibérica para disfrutarla en todo su esplendor. Prepárala a fuego medio-alto durante unos 4 minutos por cada lado, manteniendo un punto rosado en el interior.
Si no eres muy fan de la plancha y prefieres guisar las carnes, una buena alternativa es cocinar la pluma ibérica con salsa de vino tinto. Para hacerlo, únicamente necesitarás 2 piezas de pluma ibérica, sal y pimienta, vino tinto, cebolla, ajo, una ramita de romero y aceite de oliva.
Dora la cebolla y el ajo, desglasa con el vino tinto y añade el romero. Deja reducir e incorpora la pluma ibérica previamente sazonada y sellada por ambos lados. Una vez incorporada la pluma ibérica, cocina a fuego lento durante, aproximadamente, 7 minutos y sirve.
En definitiva, si buscas vivir toda una experiencia gastronómica, la pluma ibérica es para ti. Anímate a probarla y sorprende a tus invitados con una increíble.
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