¿Tienes dudas?

¿Cómo conservar el Jamón de Bellota?

Hace poco os trajimos al blog toda la información relevante que podría ayudaros a la hora de comprar Jamón de Bellota. De este modo, os contamos cómo elegir correctamente nuestra pieza de Jamón Ibérico, cómo diferenciarla del jamón serrano y todas las bondades de decantarnos por un buen Jamón de Jabugo. Si hacéis memoria, recordaréis que al final de aquel artículo prometimos realizar una segunda entrega resolviendo más dudas comunes entre los enamorados de los ibéricos. Y, como lo prometido es deuda, hemos decidido dedicar la presente entrada del blog a continuar con lo que empezamos. De este modo, hoy vamos a centrarnos en responder todas las cuestiones relativas a la conservación de nuestro Jamón Ibérico. Tanto el tiempo medio que podemos esperar dependiendo del formato que hayamos elegido hasta cómo dejar nuestros productos envasados al vacío listos para degustar. ¿Quieres conocer todas las respuestas? ¡Pues no dejes de leer!

¿Cuánto aguanta una pieza entera de Jamón Bellota?

Esta es una pregunta que, lógicamente, muchos de nuestros clientes se preguntan y que conviene conocer antes de elegir nuestra pieza. No en vano, el formato que hayamos elegido para traernos un delicioso Jamón Bellota a casa influirá bastante sobre esta cuestión.

Si hemos adquirido una pieza entera, esta puede durarnos 3 meses colgada o dispuesta sobre nuestro jamonero siempre y cuando no la empecemos. Los expertos estiman que un buen Jamón Bellota ya empezado durará entre quince y veinte días, perdiendo calidad con el paso del tiempo. Esta fecha es, por supuesto, estimada, y depende en gran medida de si estamos en verano, invierno, los niveles de humedad, etcétera. En general, el mejor consejo que podamos daros es que cuanto antes lo consumáis una vez cortado, mucho mejor.

Si, por otro lado, nos hemos decantado por el formato loncheado y envasado al vacío, hay que tener en cuenta que todas las propiedades organolépticas del producto se conservarán perfectamente mientras no abramos el sobre. Y, su duración, como ya os comentamos en otro artículo del blog, puede alcanzar sin problema los 180 días. Eso sí, una vez roto el vacío tendremos que consumir nuestro Jamón Bellota al instante, sin reservarlo para después.

¿Empezamos pezuña arriba o pezuña abajo?

Este aspecto también dependerá en buena medida de nuestros gustos y preferencias. Si queremos tomarnos nuestro tiempo consumiendo nuestro delicioso Jamón Bellota, comenzaremos por aquella zona con menos concentración de grasa, pues es la que evita que el producto vaya secándose. Lo ideal en estos casos sería consumir nuestro Jamón Bellota con la pezuña mirando hacia abajo y el empeine hacia arriba, empezando por la babilla, parte que quedará expuesta al corte.

Si por el contrario somos varios comensales los que vamos a disfrutar del Jamón en un tiempo récord, conviene situar la pezuña hacia arriba y el empeine hacia abajo, dejando al descubierto la maza, con unos cortes rápidos y fáciles al tener mayor concentración de grasa.

¿Y cuándo darle la vuelta?

Si hemos comenzado nuestro producto de la maza, al llegar al comenzar a descubrirse el fémur por la parte de arriba sabremos que ha alcanzado su rendimiento máximo. Si, por el contrario, comenzamos a ver el hueso de la cadera al empezar por la babilla, sabremos que tenemos que darle la vuelta a nuestro delicioso ibérico. Sencillo, ¿verdad?

¿Cómo conservar idóneamente nuestra pieza una vez empezada?

Bien, los expertos recomiendan cubrir la carne ya empezada con un paño de cocina, asegurándonos por supuesto de que se encuentre debidamente higienizado. Este método de conservación provocará que la capa expuesta del corte se endurezca, pero que la carne se conserve tierna bajo ella.

Si, por otro lado, queremos que nuestro corte permanezca lo más tierno posible, podremos recubrirlo con un aceite muy neutro de sabor y vigilando que su pH no sea excesivamente ácido. El aceite de oliva podría resultar una buena opción, pero teniendo en cuenta su sabor tan fuerte y marcado, muchos profesionales se decantan por el aceite de girasol.

¿Y el tocino ya cortado? ¿Sirve para conservar el producto?

Recientes estudios demuestran que las lonchas de tocino que retiramos para acceder al magro no resultan tan idóneas para proteger la pieza cortada. Al exponerse al oxígeno, comienza a enranciarse poco a poco y a aportar malos olores a la loncha. De este modo, recubrir con aceite siempre será una mejor opción.

Fuente de las imágenes: Booking

¿Cómo conservar los sobres de Jamón Bellota?

Siempre en nevera.

¿Y cómo los sirvo a mis comensales?

Antes de abrir la bolsa, resultará preciso que pierda todo el frío de nuestra nevera. Para ello, lo sacaremos de la misma con antelación y esperaremos hasta que adquiera una temperatura ambiente (entre 20 y 25 grados debería bastar). Si os veis mal de tiempo, siempre existe la opción de agilizar el proceso pasando el sobre cerrado por agua templada. Después, es tan sencillo como abrir los sobres, separar las lonchas con cuidado y depositarlas sobre un plato. Después de esperar unos cinco minutillos a que el producto se oree y recupere sus deliciosos aromas naturales, ¡ya estará listo para comer!

Deja un comentario

Inicia sesión para publicar comentarios.